El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, logró vencer a su contendiente republicana Nikki Haley en las primarias celebradas en Carolina del Sur este sábado. Este triunfo consolida aún más la posición de Trump como líder indiscutible en la competencia por la nominación republicana, acercándose cada vez más a un posible enfrentamiento con el demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales de noviembre.

La derrota de Haley, conocida por representar al ala más moderada del Partido Republicano y haber ejercido como gobernadora del estado durante seis años, marca un revés significativo en su carrera política. La implacable campaña de Trump en las primarias anteriores sigue demostrando su capacidad para movilizar a sus seguidores y consolidar su liderazgo en el partido.

A pesar de los desafíos legales que enfrenta, Donald Trump, de 77 años, se erige como el favorito destacado en la carrera por la nominación republicana. Los medios estadounidenses anunciaron su victoria apenas segundos después del cierre de los colegios electorales, subrayando la contundencia de su respaldo.

El politólogo David Darmofal, de la Universidad de Carolina del Sur, señaló que la victoria de Trump sobre la exgobernadora Nikki Haley en su propio estado natal podría consolidarlo como el candidato prácticamente seguro del Partido Republicano. La atención ahora se centra en cómo Trump enfrentará a sus rivales internos, con la expectativa de que pueda forzar a Haley, su exembajadora en la ONU, a retirarse de la contienda, replicando lo ocurrido con otros competidores.