Comunidad internacional rechaza legitimidad de elecciones en Venezuela tras ratificación de Maduro

Nicolás Maduro ha sido ratificado nuevamente como el ganador de las elecciones presidenciales del 28 de julio por la Suprema Corte de Justicia de Venezuela, en una decisión que ha generado un torrente de críticas internacionales. Esta semana, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) confirmó el resultado de las elecciones sin presentar las actas correspondientes, un hecho que ha alimentado las acusaciones de fraude. La falta de documentación y transparencia ha llevado a varios países a cuestionar la legitimidad del proceso electoral en Venezuela.

El presidente chileno Gabriel Boric fue contundente en su rechazo a la decisión del TSJ, calificando el fallo como una consolidación del fraude. En su mensaje, Boric denunció que el régimen de Maduro ha falsificado elecciones y reprimido a quienes piensan diferente. Boric también criticó el trato que se le da a la democracia en Venezuela, señalando que el país enfrenta una dictadura que ignora las aspiraciones democráticas de su población.

Desde Guatemala, el presidente Bernardo Arévalo expresó su solidaridad con el pueblo venezolano y también rechazó los resultados de las elecciones. Arévalo afirmó que el régimen de Maduro no es democrático y que la crisis en Venezuela se refleja en los recientes comicios. En la misma línea, el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, también condenó la situación en Venezuela, describiéndola como una dictadura que suprime las oportunidades de una vida democrática para su gente.

Además, mandatarios de Paraguay y España han pedido mayor transparencia en el proceso electoral. Santiago Peña, presidente de Paraguay, señaló que es inaceptable validar resultados sin una revisión exhaustiva e independiente, mientras que España ha exigido la publicación íntegra y verificable de las actas para reconocer el resultado de las elecciones. El gobierno español ha indicado que continuará trabajando con socios europeos y latinoamericanos para asegurar que se respete la voluntad democrática del pueblo venezolano.

A pesar de la presión internacional, países como Brasil, México y Colombia, que han jugado papeles de mediación en la crisis venezolana, aún no han manifestado públicamente su posición respecto al fallo del TSJ. La comunidad internacional sigue observando de cerca la situación en Venezuela, con un llamado general a la transparencia y justicia en el proceso electoral del país sudamericano.